ENTES PÚBLICOS AJUSTAN LAS FINANZAS
La Universidad de Buenos Aires dispuso recortes para poder seguir funcionando
La medida fue tomada por el Consejo Superior debido a la imposibilidad de afrontar los gastos. A través de una resolución, la casa de estudios dispuso una serie de pautas.
La Universidad de Buenos Aires decidió cortar el suministro eléctrico de todas las áreas comunes y limitar el uso de los ascensores (el edificio cuenta con 16 pisos) que sólo pueden utilizar personas con movilidad reducida.
La casa de Estudios decidió, entre otras medidas, la no utilización de aire acondicionado ni de las calderas para todos los edificios de la universidad, exceptuando a los hospitales; el apagado de iluminación en aulas y oficinas iluminadas naturalmente y en espacios comunes de circulación; y la utilización de ascensores solo para aquellas personas con movilidad reducida y casos de asistencia o emergencia.
Al mismo tiempo se resolvió que las convocatorias realizadas para los programas de investigación, ciencia y técnica y extensión universitaria estarán supeditados a la efectiva disponibilidad de presupuesto para poder ser afrontadas y que el programa UBA en Acción estará limitado a las actividades financiadas por organismos externos a la UBA y/o aportes privados.
A través de ese plan alumnos avanzados y docentes de distintas facultades, ofrecen atención gratuita odontológica, oftalmológica, médica, análisis de sangre, confección de anteojos, servicios veterinarios y asesoramiento jurídico y contable para poblaciones en situación de vulnerabilidad del área metropolitana.
En la resolución se dispuso, también, que estas medidas de urgencia se suman a las que la universidad ya había implementado: plan de reducción de alquiler de edificios y readecuación de la seguridad.
La UBA decidió que tampoco habrá nuevas becas, ni actividades de extensión.
Según se informó de la institución, pese a la actualización parcial anunciada por el Gobierno, los fondos para gastos de funcionamiento implican un recorte en términos reales del 80%. Por cada $10 que contaba la UBA en marzo de 2023, hoy tiene $2. A este contexto se suman los reclamos salariales.